Noticias de Elgoibar
Elgoibar fué evacuado en una proporción importante. El sexo masculino en particular dió el mayor contingente, dejando por lo tanto en el pueblo una sensación de vacío, que es causa de su desanimación actual.
La entrada de los fascistas fué recibida muy fríamente y a la cabeza de los pocos receptores iba el conocido Nazario Osoro, que en un tiempo regentó la Fonda Artola. Ya le conocéis ¿verdad?
Entre los que integran el Ayuntamiento están el ex pelotari Daniel Ansola y Manuel Quintana, que es nada menos que el “señor alcalde”.
En la fábrica de San Pedro trabajan algunos obreros, claro está que obligados y de los seis días que trabajan sólo les son abonados tres. Los otros tres jornales los precisa el “ejército salvador”. Si no, ¿de dónde iban los soldaditos a poder cobrar dos realitos cada día?
Como escasea el carbón, se teme tengan que parar.
Todo el mundo se ve obligado a trabajar en la construcción de trincheras y carreteras. Una construyen entre San Miguel y San Pedro y por jornal se dá el rancho que comen. Los adinerados escapan a este esfuerzo, mediante el pago de cinco pesetas diarias a los jefes requetés.
Hay muchos multados y entre ellos las hermanas Arregi y la presidenta de Emakume Abertzale Batza, Máxima de Izeta, que lo ha sido con 2.000 pesetas.
En el Batzoki están los requetés y en el que fué Circulo Liberal los de Falange. En Alzola hay instalados hospitales y son sus enfermeras las niñas “góticas” de la buena (?) sociedad. Algunas de ellas hacen honores a la oficialidad fascista.
Entre los que han “progresado” figura el conocido Arrese que es nada menos que sargento. Y al que era factor de la Compañía de los F.V. en Elgoibar, le han hecho jefe de la estación de Deba.
A los niños se les instruye en el arte militar, para que cuando sean mayorcitos nos hagan frente ¿no? y pueden elegir entre las formaciones requetés o falangistas. ¡Que monos estarán con los fusiles al hombro!
¡Pobrecitos!
Pasados los primeros días la aparente tranquilidad se vió repentinamente turbada por el conocimiento de la prisión y fusilamiento en Donostia del virtuoso sacerdote don Celestino Onaindia. La impresión que esta noticia causó fué enorme y hasta en los más afines fascistas del pueblo hubo condolencias por el trágico suceso.
Más tarde fueron conducidos a la cárcel un grupo de jóvenes sorprendidos en el caserío “Larruzkain”, cerca de Markina, entre los que figuraban Angel Osoro el inolvidable “Aberri”, el ex pelotari Félix Gastesi, Paco Riaño, Alberto Gurrutxaga y Enrique Arriola.
Después de unos días de cárcel, fueron llevados a Donostia “Aberri” y Gastesi, creyéndose fueron fusilados. Los demás fueron libertados y continúan allí.
Como de interés, sobre todo para los patriotas, diremos que la entusiasta emakume Juaristi´ar Miren, conocida idazle “Mirentxu”, fué llevada a Tolosa según se cree, y después de quince días de prisión traída de nuevo a la villa. la inolvidable “Mirentxu” debió de sufrir las mayores amarguras y por ello se encuentra en un estado de depresión de ánimo tremendo. Su estado físico es también lamentable.
Las casas deshabitadas han sido cómo no – saqueadas y únicamente parece ser que han respetado aquellas en que quedaron mujeres solas.
Noticias de Mendaro
También en este simpático roncón hicieron blanco las iras requeté-falangistas. Las consideraciones de que estuvieron rodeados durante nuestra permanencia en el pueblo no se ha visto correspondida por esta gente desentrañada e infame.
Apenas asomados los insurgentes viéronse ya desatados los instintos perversos del fascio. Cuantos hubieran mostrado antes su repulsa saca los causantes de la rebelión, habían de pagar su osadía.
Las víctimas no se hicieron esperar. Y unos hombres más, pasaron a engrosar la trágica lista de los que no cometieron más delito (?) que ser demócratas y hombres de bien.
Salbador Izagirre, tabernero
Mariano Arrillaga U.G.T.
No acaba uno de hacerse a la idea de que en corazones humanos puedan albergarse instintos tan perversos y criminales.
Sabemos también que personas bien conocidas de vejaciones sin cuento, multas cuantiosas, saqueos escandalosos, etc, etc. Y sabemos quiénes son los sinvergüenzas que se han erigido en cabecillas de todos estos desmanes. Pero todo tiene su hora en este mundo y no esta lejos el día en que habréis de rendir cuentas a la Justicia de vuestros procederes inhumanos.
Euzko Langile, 27 de Diciembre de 1936